Salmo 85: Reflexión, Explicación y Interpretación
Salmo 85
- Al Músico principal: Salmo para los hijos de Coré. FUISTE propicio á tu tierra, oh SEÑOR: Volviste la cautividad de Jacob.
- Perdonaste la iniquidad de tu pueblo; Todos los pecados de ellos cubriste. (Selah.)
- Dejaste toda tu saña: Te volviste de la ira de tu furor.
- Vuélvenos, oh Dios, salud nuestra, Y haz cesar tu ira de sobre nosotros.
- ¿Estarás enojado contra nosotros para siempre? ¿Extenderás tu ira de generación en generación?
- ¿No volverás tú á darnos vida, Y tu pueblo se alegrará en ti?
- Muéstranos, oh SEÑOR, tu misericordia, Y danos tu salud.
- Escucharé lo que hablará el Dios SEÑOR: Porque hablará paz á su pueblo y á sus santos, Para que no se conviertan á la locura.
- Ciertamente cercana está su salud á los que le temen; Para que habite la gloria en nuestra tierra.
- La misericordia y la verdad se encontraron: La justicia y la paz se besaron.
- La verdad brotará de la tierra; Y la justicia mirará desde los cielos.
- El SEÑOR dará también el bien; Y nuestra tierra dará su fruto.
- La justicia irá delante de él; Y sus pasos pondrá en camino.
Reflexión sobre el Salmo 85
El Salmo 85 es un canto de esperanza y restauración. Los hijos de Coré, quienes componen este salmo, expresan un profundo reconocimiento de la misericordia y perdón de Dios. Reflexionar sobre este salmo nos invita a considerar cómo, incluso en tiempos de adversidad, la fe en la compasión divina puede renovar nuestra esperanza. El salmo comienza con un recordatorio de la gracia pasada de Dios y se mueve hacia una súplica ferviente por la restauración y la renovación espiritual.
Explicación del Salmo 85
En los primeros versículos, el salmo celebra la bondad de Dios al perdonar los pecados de su pueblo y cesar su ira. La referencia a la vuelta de la cautividad de Jacob puede interpretarse como una restauración de la nación después de un período de exilio o sufrimiento. A medida que avanzamos en el salmo, encontramos una súplica por la restauración continua, pidiendo a Dios que no permanezca enojado para siempre y que vuelva a dar vida a su pueblo.
Los versículos 10 y 11 presentan una hermosa imagen de la armonía divina: “La misericordia y la verdad se encontraron; la justicia y la paz se besaron”. Esto simboliza la perfecta unidad de las virtudes de Dios, que culminan en la bendición y prosperidad del pueblo.
Interpretación del Salmo 85
Este salmo puede ser interpretado como una oración por la redención y la paz, tanto a nivel personal como comunitario. Los creyentes pueden encontrar consuelo en las promesas de Dios de perdón y renovación. La descripción de la justicia y la paz besándose puede verse como una visión profética del reino de Dios, donde estas virtudes coexisten perfectamente. Además, la súplica final para que Dios guíe con justicia y prepare el camino puede ser vista como una anticipación del Mesías, quien traería justicia y paz duraderas.
Conclusión
El Salmo 85 nos ofrece una rica meditación sobre la misericordia, el perdón y la esperanza en tiempos de prueba. Nos recuerda la fidelidad de Dios en el pasado y nos anima a confiar en su promesa de restauración y paz. Al meditar en este salmo, podemos encontrar fuerza y esperanza para enfrentar los desafíos presentes, confiando en que la misericordia y la justicia de Dios siempre prevalecerán.