Salmos 94: Reflexión, Comentario y Análisis
Salmo 94
- SEÑOR, Dios de las venganzas, Dios de las venganzas, muéstrate.
- Ensálzate, oh Juez de la tierra: Da el pago a los soberbios.
- ¿Hasta cuándo los impíos, Hasta cuándo, oh SEÑOR, se gozarán los impíos?
- ¿Hasta cuándo pronunciarán, hablarán cosas duras, Y se vanagloriarán todos los que obran iniquidad?
- A tu pueblo, oh SEÑOR, quebrantan, Y a tu heredad afligen.
- A la viuda y al extranjero matan, Y a los huérfanos quitan la vida.
- Y dijeron: No verá JAH, Ni entenderá el Dios de Jacob.
- Entended, necios del pueblo; Y vosotros fatuos, ¿cuándo seréis sabios?
- El que plantó el oído, ¿no oirá? El que formó el ojo, ¿no verá?
- El que castiga las gentes, ¿no reprenderá? ¿No sabrá el que enseña al hombre la ciencia?
- SEÑOR conoce los pensamientos de los hombres, Que son vanidad.
- Bienaventurado el hombre a quien tú, JAH, castigares, Y en tu ley lo instruyeres;
- Para tranquilizarle en los días de aflicción, En tanto que para el impío se cava el hoyo.
- Porque no dejará SEÑOR su pueblo, Ni desamparará su heredad;
- Sino que el juicio será vuelto a justicia, Y en pos de ella irán todos los rectos de corazón.
- ¿Quién se levantará por mí contra los malignos? ¿Quién estará por mí contra los que obran iniquidad?
- Si no me ayudara SEÑOR, Presto morara mi alma en el silencio.
- Cuando yo decía: Mi pie resbala: Tu misericordia, oh SEÑOR, me sustentaba.
- En la multitud de mis pensamientos dentro de mí, Tus consolaciones alegraban mi alma.
- ¿Juntaráse contigo el trono de iniquidades, Que forma agravio en el mandamiento?
- Pónense en corros contra la vida del justo, Y condenan la sangre inocente.
- Mas SEÑOR me ha sido por refugio; Y mi Dios por roca de mi confianza.
- Y él hará tornar sobre ellos su iniquidad, Y los destruirá por su propia maldad; Los talará SEÑOR nuestro Dios.
Reflexión sobre el Salmo 94
El Salmo 94 es una súplica intensa y apasionada a Dios, pidiendo justicia divina contra los opresores y los impíos. Es una invocación al SEÑOR como Dios de las venganzas, rogándole que se manifieste y actúe contra aquellos que hacen el mal y oprimen a los justos. Este salmo refleja la angustia y la desesperación de los fieles ante la aparente prosperidad de los malvados y la injusticia prevalente.
Comentario sobre el Salmo 94
- Versos 1-3: Estos versículos comienzan con un llamado directo a Dios como el juez y vengador, pidiendo su intervención contra los arrogantes y los impíos que prosperan. La repetición de “Dios de las venganzas” subraya la urgencia y la gravedad de la situación.
- Versos 4-7: Aquí se detallan las acciones malvadas de los opresores: pronuncian palabras duras, se glorían en su maldad, y oprimen a los vulnerables como viudas, huérfanos y extranjeros. Su arrogancia es tal que piensan que Dios no ve ni entiende sus actos.
- Versos 8-11: Estos versículos contienen un llamado a la razón para los necios y fatuos del pueblo, recordándoles que Dios, quien creó el oído y el ojo, ciertamente oye y ve todas las cosas. El conocimiento de Dios sobre los pensamientos humanos se destaca, subrayando la futilidad de sus maquinaciones.
- Versos 12-15: La bienaventuranza se otorga al hombre a quien Dios disciplina e instruye en su ley. La disciplina divina tiene un propósito redentor y protector, asegurando que los justos no serán abandonados y que la justicia prevalecerá eventualmente.
- Versos 16-19: Aquí se plantea una pregunta retórica sobre quién defenderá al justo contra los malvados. El salmista reconoce que sin la ayuda de Dios, estaría perdido. La misericordia y las consolaciones de Dios son presentadas como el sustento y la alegría en medio de la adversidad.
- Versos 20-23: El salmo concluye con una afirmación de la justicia final de Dios. Los tronos de iniquidad no pueden aliarse con Dios, y aquellos que conspiran contra los justos serán juzgados y destruidos por su propia maldad. Dios es el refugio y la roca de confianza para los justos.
Análisis del Salmo 94
El Salmo 94 ofrece una poderosa meditación sobre la justicia divina y la providencia de Dios. Sirve como un recordatorio de que, aunque la injusticia y la maldad pueden parecer dominantes, Dios ve, oye y actuará en el tiempo adecuado. La confianza en la justicia divina y la misericordia de Dios proporciona consuelo y esperanza a los fieles en tiempos de prueba.
Este salmo no solo es un clamor por justicia, sino también una afirmación de la fe en el carácter justo y misericordioso de Dios. Nos insta a confiar en la protección divina y a esperar con paciencia la intervención de Dios en nuestras vidas.